WIKA presentó el año pasado durante Farmaforum su nuevo transmisor de proceso in-line modelo DMSU22SA, diseñado para aplicaciones higiénicas en las industrias farmacéutica y alimentaria. Con homologaciones EHEDG y 3-A, este dispositivo mejora la fiabilidad de los procesos y reduce el consumo de recursos como energía y agentes de limpieza, contribuyendo a procesos más sostenibles y económicos.
El DMSU22SA se destaca por su integración en el tubo mediante una conexión estéril y su capacidad de comunicación digital gracias al protocolo HART®. Este transmisor introduce un elemento sensor de forma elíptica, que ofrece una compensación activa de temperatura y una precisión de medición de 1% del caudal, superando a los sensores metálicos convencionales en fiabilidad y control.
Innovaciones clave
- Mide sin riesgo de contaminación: elimina el uso de líquidos de transmisión, reduciendo el riesgo de contaminación en caso de averías.
- Durabilidad y robustez: el sensor de acero inoxidable 316L es hasta diez veces más resistente que los separadores de membrana tradicionales, garantizando elasticidad y precisión.
- Autocontrol integrado: un sistema de supervisión detecta fugas y envía alertas mediante HART® o el bucle de corriente, mejorando la seguridad operativa.
- Optimización del comportamiento de fluidos: el diseño reduce el consumo energético y de detergentes en procesos CIP y SIP, contribuyendo a la sostenibilidad y ahorro de costes.
Este transmisor representa un avance significativo en la monitorización de presión, alineándose con los objetivos de sostenibilidad y eficiencia de las industrias farmacéutica y alimentaria.